Fracturas del devenir es una serie de fotos tomadas por dentro, pasadizos poblados de celajes que producen tanta extrañeza como familiaridad en su dolor y deseo a través de una voz agraciadamente sola; hija de un cerebro cálido y un alma meticulosa.
KATTIA CHICO poeta laureada.
Si la fiebre es el síntoma del hombre que dejó de existir, la fractura del lenguaje es su voz. Torres nos presenta su discurso hist(ó)(é)rico deseando conformar su propio sistema. La poesía es una suerte de ciencia suelta. Un poeta anda suelto. No hay cura.
RAFAEL ACEVEDO poeta y novelsita laureado.
John Torres estudio Psicología Forense en la Universidad de Puerto Rico. Su trabajo ha sido publicado en diarios, revistas literarias y antologías poéticas en Puerto Rico y el extranjero. Actualmente reside en Puerto Rico. ___________________________________________________________
Fractures of Future is a series of pictures shot from the inside, shadow populated corridors that evoke strangeness as well as familiarity in its misery and desire. A unusual lonesome discourse produced by a warm brain and a meticulous soul.
KATTIA CHICO award winning poet.
If the fever is the symptom of the man that quitted existence, the fracture is his voice. Torres works his hist(e)(o)ric discourse wishing to fulfill his own system. Poetry is a lose science. A poet is on the loose. There’s no cure.
RAFAEL ACEVEDO award winning poet and novelist.
John Torres studied Forensics psychology at the University of Puerto Rico. His works have been published in literature magazines and anthologies in Puerto Rico and other countries. He currently lives in Puerto Rico
__________________________________________________________________________________
JOHN TORRES
FRACTURAS DEL DEVENIR ( FRAGMENTOS)
3.1 Bitácora del sueño
El sueño es la acción del lenguaje que fabrica un cuerpo para el espíritu.
-Klossowski
La región confortable
Como un fantasma en la noche
la mano de mi madre me llama.
-Leopoldo Panero
Siempre prefirió los colores sensibles
lo recuerdo
claro que lo recuerdo
corre tras el tiempo esquivo
en las lluvias de abril
volamos lentamente sobre rosas pintadas
mi madre me llama desde las puertas de un río
inscritas en el anverso de una obra transparente
mi madre me grita desde el trasbordador Blanchot
sedienta disfruta los placeres del trasmundo
capitanea la misión: Las Imágenes del Cuerpo
yo la contemplo furtivo
por una pequeña hendidura
desde el otro lado
hasta la próxima temporada
cuando decida posarse
sobre los órganos de alguna de las sacerdotisas
y afine sus cuerdas y moje sus labios
y me cante el universo
ese único verso originado en las inclemencias
de su desatinado destino
como solía hacer antaño
en casa
cuando yo era de algodón
cuando todo estaba bien.
Mitos(is) Isis
Después de tantos siglos
te encontré durmiendo
sobre las lunas
tras los reveses
en las charcas del azar
del almadesal del solitariosol
te vistes de crepé para una fiesta imprecisa
tu ponencia sobre retórica y fosforescencias eróticas.
¿Cómo pude extraviar el día?
Todo es posible, eres humano, eres de humo.
Estás hecho con el aliento de la cosa
de bocanadas de la costa tantálica.
Los días se suceden en blackandwhitecinematics
hay nuevas y asombrosas verticalidades en tu tristeza
y te jactas de ella, de tu voluptuosa tristeza
tu tristeza hace apariciones cameo en parajes novedosos
viví tu tristeza en la tele mientras me quemaba la comezón de tu tristeza
grabo tu tristeza en el orden de las amebas
y las amebas me tallan en la luz de tu tristeza
Nunca nos conocimos, somos un lapsus preprogramado
una broma pesada para aliviar la carga de las curvas del tiempo.
Dicen que al probar el cáliz podremos sintonizar
con la estación del anima de la que tanto hablas y presumes perdida
insisten que al regresar el pasado será escindido
y reconstruiremos la barca burlaremos la memoria
que no es justamente resonancia ni sueño
sino un preciso mecanismo de olas
detendremos la peste si aislamos la bacteria
sus isótopos de vidrio
así como la Sustancia Total se recluye en una gota;
duerme y descansa de tu circunstancia y tus circunloquios
recrea el signo, la raíz, el segundo.
A life less ordinary
Youll wake up singing trying to take to the sky.
Nothing will harm you then.
-Janis Joplin
It was the crying area
next to the smoking area
there were big sofas
and even beds,
every one lamenting
no questions asked
un neonato eleva un himno desgarrador
he must be in some horrible state of pain
también cantas desgarrada
y eres su par por un rato.
Honorable discharge
(Inclosión honorable)
Escapar es siempre un pase al origen.
-Deleuze
En el momento preciso escaparé
por la ventana de su vientre.
Coloquio desde la colmena
Decidida a saciar mi grotesca hambre de observación,
comenzaste a tallar tu exponencial torre de levadura.
Transcribí frenéticamente los mil y un jeroglíficos.
El método será proporcionalmente impreciso.
Sangré profusamente ideando algún engaño significable,
algún signo delator.
¿Y qué de nosotros arrojados de la ciudad sedientos de venganza?
Finalmente enfrentaremos nuestra obsesión por no pertenecer.
He calculado tus años, trescientos sesenta y nueve suman
nada mal, claro está, considerando que el cuerpo
también soporta los achaques de la mente.
Para sanar necesitas mil pequeñitos murmullos sobre las venas aereas.
Estos cristales son mi creación una cierta aproximación
al recinto de la longevidad.
Propulsados por nuestra comulgada histeria.
No vivirás más tiempo pero al menos morirás más despacio.
A pesar de lo que usualmente pensamos, lo importante es la transición
el resto es un fútil intento de retraso.
El aliento es solo un puente movedizo entre el ser y la tierra
los temblores, paliativos, estados alterados de las lenguas.
Al regresar me encontraba en otra habitación, joven aún,
y tú apenas una sombra viscosa.
Comenzaste el interrogatorio con una danza fúnebre
como ésas que ensoñamos en el paroxismo de los días fogosos.
Celebrabas la no llegada de la razón
salivabas sardónica desnuda del día a día,
una obscena invitación a lo elemental.
Al final, ya no eras, ni tú ni tus restos.
Te desperdigaste y el mundo fue otro
yo lamentablemente olía a ti
y eso fue todo lo que quedó
el aire
sólo el aire
irremediablemente infectado.
Crackcoroco
(The addictive nature of birds)
Me acosté extendido en un inmenso corral
hablando con la señora gallina
se sentía sola y de tarde
miraba insepulta,
siempre me guardó un poco del miedo
al póker.
Volaba a orillas
con algo de incomodidad,
a pesar de lo enredados
no atinábamos la mareada,
la mente se escurría,
lamento que todo tenga que ser así.
Tal vez percibía otro
los pequeños mordiscos
en la charca del alma,
hondonadas a medio colmar.
Ambos somos cleavage
y los cuerpos se ahogan,
las palabras sobran
en la hora barbitúrica.
Available at http://www.islanegra.com/ / http://www.tertulia.com/
____________________________________________________________
De luz y sombra Por Mario Alegre Barrios. EL NUEVO DIA / POR DENTRO
John Torres debuta en el mundo literario con su poemario “Fracturas del devenir”, libro en el que convergen juego y autocrítica.
Un poeta es un pequeño dios...
El primer libro de John Torres- sintetiza la efervescencia de ese género literario entre la nueva generación de escritores puertorriqueños, como es el caso de este autor que se suma a nombres como los de Amarilis Tavárez, Juanmanuel González, Federico Irizarry y Julio César Pol. “Un poeta anda suelto”, dice Acevedo de Torres. Y “no hay cura”, sentencia, como presentación de este joven poeta sanjuanero que tiene en Fracturas del devenir (Isla Negra) su debut literario como secuela de un proceso que se remonta a la muerte de su madre hace poco más de un lustro. En la poesía John encontró un espacio de luz y sombra para exorcizar sus demonios y reconciliarse consigo mismo. “Nunca había escrito nada... sí, leía bastante, pero nunca había considerado la escritura, hasta que murió mi madre”, recuerda John. “Ese fue el detonante para intentar poner en orden muchas cosas en mi vida, después de mucho tiempo de andar dando bandazos”. De pocas palabras -cuando habla, mas no cuando escribe- John explica que siempre ha sido un tanto huraño, bastante dado a la soledad y que de niño ese rasgo alimentó notablemente su habilidad para fantasear, sin espacio para pensar seriamente en momento alguno lo que habría de hacer con su vida. “Me crié como hijo único y cuando llegó el momento de entrar a la universidad, solicité para ingeniería en Mayagüez y para física en Ponce. Me aceptaron en ésta, pero luego me cambié para computadoras, para ver si le podía sacar algo”, señala. “El problema es que no soy muy bueno en matemáticas y terminé estudiando psicología forense... ya tengo mi maestría en eso y en agosto empiezo mi internado”. “Las sílfides” fue su primer poema -está incluido en Fracturas del devenir- arranque de un quehacer que para John tiene mucho de juego y también de autocrítica. “No me da miedo desnudarme en el poema... porque no siempre lo hago”, dice con una sonrisa. “Sé que en eso, en ver al poeta desnudo, está parte del morbo con el que algunas personas leen poesía. Yo no lo hago con frecuencia, me gusta ficcionalizar y también inventar, jugar con palabras que no existen y criticar mi propio trabajo. Siento que así le quito un poco del rigor excesivo que muchas veces aleja al lector”. “alma meticulosa” John señala que el libro lo trabajó como si fuera “un poema grande”, con una unidad consistente a través del largo proceso que lo completó. “Escribo lento... además no tengo mucha disciplina en general. Cada quien llama a la musa como quiere... yo trato de aprovecharla cuando llega. Escribir poesía es como otras cosas en la vida, algo que llega, se agota y se recarga. No pienso mucho en eso, sólo sé que todo lo que pasa en la vida tiene un propósito”. “Fracturas del devenir es una serie de fotos tomadas por dentro, pasadizos poblados de celajes que producen tantas extrañezas como familiaridad en su dolor y deseo a través de una voz agraciadamente sola; hija de un cerebro cálido y un alma meticulosa”, dice la poeta Kattia Chico de la ópera prima de John, mientras que José Liboy señala que en este libro “hay dos polos que estructuran el libro”. “Uno de ellos es la disolución de los amantes en las drogas, y el otro es la imagen que resulta, como los hijos en el neotomismo, de la ruptura de esa relación amorosa”. Con absoluta sinceridad, John asegura que no escribe para alguien en especial, excepto para él, para su propio disfrute. “En verdad que no pienso en complacer a otro lector que no sea yo... si lo hubiera hecho, este libro no hubiera salido”, dice con firmeza. “Ver publicado este libro me ha dado una gran emoción porque yo no tenía idea de que esto se podría convertir en una realidad... no me visualizaba como un escritor de oficio”. Como colofón, John destaca que el proceso de selección de los poemas que finalmente fueron parte del libro fue bastante arduo, pero que está muy complacido con el resultado. “Sí, creo que están los poemas que deben estar... me releo mucho y estoy tratando de evitarlo. Es muy angustioso porque siempre pienso que el poema pudo haber quedado mejor, pero hay que aprender a vivir con eso”.
____________________________________________________________
John Torres, Juanmanuel González: El brillante deseo del poema
Por: Marioantonio Rosa: Escritor y Critico de Literatura
Un primer libro de poemas es siempre una pieza de asombro. Luis Buñuel, quitando la parte oscura de aquella expresión, lo llamaría objeto del deseo. Un primer libro de poemas es una caja de música, porque remite a una primera melodía. El poeta que lanza su primer libro de poemas, desde su voz al mundo, es un cazador que va en pos de la palabra exacta a la cual pueda arrebatarle, a gusto, la existencia y buscarle horizontes nuevos a través de rendir metáforas, o metametáforas, en la búsqueda de un estilo propio. Diremos entonces que el poeta es un cazador que por vez primera afina su caja de música, es decir, su primer libro de poemas. Su voz llega a los lectores para atraparlos, para cazarlos, para cautivarlos. El escuchar la voz del poeta unida a su propuesta es dejarse atrapar, porque la poesía aparte del rigor, exhala seducción, deseo de marcar otro camino muy lejano al horario cotidiano.
Observamos a Walt Whitman en su sillón póstumo, contemplativo y excelso. Las palabras ahora son maravillosas, destemplan todos los escapes hacia la soledad. Whitman en su barba tiene todavía la mariposa olvidada de Federico García Lorca, luego de su Poeta en Nueva York . Podemos observar a Samuel Taylor Coleridge definiendo su sustancia dentro de la inmensidad de la existencia. Rosario Castellanos viene del ser definido en Poesía a través del magistral poema Lamentación de Dido cuyos caminos de imágenes todavía nos revelan dimensiones de belleza y música. Pedro Salinas nunca pudo escapar del Mar Atlántico y puertorriqueño, lo sigue contemplando, irrefrenable. Julia de Burgos siempre fue su propio río, luego del arrobamiento de Río Grande de Loíza, Clara Lair sigue desbocando imágenes desde su Trópico Amargo, Marina Arzola, Ángela María Dávila, Francisco Matos Paoli, todos poetas de magnitud y brillo han sido seductores desde la primera vez. De modo que un libro de poemas lanzado al eco del mundo es el deseo del poeta a ser parte de ese eco, vestirse con ese eco, lograr ser también un eco.
De esta luminosa vendimia surgen dos nombres: John Torres y Juanmanuel González. Entran al mundo de la palabra con sus libros Fracturas del devenir y Sobre todo tus silencios bajo la rúbrica de la Editorial Isla Negra. Dos libros con su profundidad, su contraposición, su dialecto, su esfera hablada de imágenes y cómo no, su matemática. Hay una madurez inusitada en ambos libros. Ese es un factor resuelto para el poeta que desea el poema exacto. La intertextualidad es brillante, abrasadora, conjuga así, un robusto panorama hecho por el poeta para el embarque a los sentidos. Ambos libros desean tener una piel sensorial, arcana, o sencillamente invocar una magia que el lector toma y hace suya, por medio de la palabra iniciadora de los versos.
John Torres le llama fractura, surco nuevo, derrotero, espacio infinitesimal, medido en brasas colindantes con el Canto Cósmico de Ernesto Cardenal, aunque el poeta lleva también junto a su libro una bitácora de todos los diálogos hechos frente a la diversidad de autores. Podemos encontrar a Michelle Foucault, Georges Bataille, Octavio Paz, Robert Desnos, y la siempre adorable Janis Joplin. El devenir implica para John un futuro que puede terminar con laceraciones hechas por el presente, quizá hasta halla una fractura.
El libro tiene su componente lúdico, sus encerronas, hay una inestabilidad creada por la lectura del alma y de la mente. El poeta usa su vestido herido de sensaciones, de divergencias, del cauce subvertido del espíritu en contemplaciones, del lado triste de un ideal, la ironía brinda apoyo al mensaje que se desea entregar. El dolor tiene su representante en el poema bilingüe A Life lees ordinary que usa como epígrafe una estrofa en la voz solitaria de Janis Joplin. El poeta observa, es inquilino en una casa desbordada de vacíos. Los vacíos son el área de llanto y soledad. Humo de cigarrillo y más al fondo, un neonato sigue desgarrando su voz. El poema es logrado porque nos brinda la penumbra que se necesita para leerlo, te vas haciendo compañero del poeta y casi eres como él. En el poema Romance de un pistolero la brevedad se atreve a ser un signo de máxima profundidad. ¿Acaso nos sucede lo mismo que al pistolero? Vamos y venimos en el trapecio de nuestras vidas, dice el poeta sin necesariamente estar armados con un revólver, venimos en nuestro drama humano, no podemos marcharnos y mucho menos quedarnos. Vivimos bajo la consigna de volver o no volver.
Habita en Fracturas del devenir el refrescante rapto de los conceptos científicos, tecnológicos, biológicos y se le asignan nuevas asonancias, fronteras vivas con el uso novedoso de la palabra y el texto. Ya sabemos que Kafka tiene un microbito, Descartes se descarta a sí mismo, que podemos enfermarnos de una mujer, y que el éter especula y no impone como estamos acostumbrados a escuchar. El libro tiene tres capítulos de hechos poéticos: Bitácora del sueño, De Santos y Síntomas, y desde luego, Especulaciones del éter. El poeta ha trabajado intensamente para una vez lanzado, también se intente la adquisición de una personalidad poética. El uso del caligrama es saludable y siempre despoja los contornos que nos hacen llegar a la memoria de Apollonaire.
--[Subscribe FEEDSHOW Revenue sharing program]
provider=[Google]
uid=[pub-0825201213646390]
option=[5338430085]
--[Subscribe FEEDSHOW Revenue sharing program]
2 RESENTIMIENTOS:
Se lee muy interesate, espero que te valla genial con la venta, vere si lo consigo en el país, un abrazo.
Te leo
Exito, poeta, que eres de los grandes!!
Publicar un comentario
ACCEPT OR DENY?